Quinto puesto de Peñalver en Noruega
Buen final para el alicantino en la segunda etapa de la Arctic Race. Los seis del Burgos BH comenzaron el día al cobijo del pelotón dejando que otros equipos tomasen el protagonismo y responsabilidad de la etapa, para evitar contratiempos y poder llegar lo mejor posible al último tramo de colinas. A mediados de etapa, cuando la carrera se encaminaba hacia Finlandia, un intenso viento frontal tensó la carrera y estiró el pelotón. Pese a ello, el conjunto burgalés se mantuvo hermanado y trabajó para situar a Manuel Peñalver en la cabeza del grupo pensando en las opciones que tenía de cara a una llegada masiva. En la meta de Kilpisjärvi, en la Laponia finlandesa, Peñalver remató la labor del equipo con un quinto puesto en un cara a cara con los favoritos al sprint, pese a haberse quedado cerrado a 150 metros de la línea de llegada.
Jornada salvada en Portugal
La carrera lusa tenía preparada una jornada similar a la de ayer, pero con un ligero incremento de dureza de la media montaña. El Burgos BH optó en el día de hoy por una estrategia más conservadora. Con cautela el equipo se mantuvo atento en el pelotón a la espera de que la situación de carrera cambiase en la parte final del día. Durante los últimos veinte kilómetros, en la subida al Alto de Retaxo, última cota de la etapa, el equipo trabajó por un lado para mantener con opciones a Alex Molenaar y, por otro lado, colaboró en la cabeza del pelotón para dar caza al grupo delantero. La carrera desembocó en Castelo Branco rota en varios grupos por la velocidad y el esfuerzo acumulado en el último puerto, y el joven Molenaar pudo llegar encabezando un segundo pelotón que terminó menos de un minuto del ganador.
Mañana, el Burgos BH mantiene el ritmo con la triple ración de carreras. La Vuelta a Burgos llega a su fin en la Sierra de la Demanda con la mítica ascensión a las Lagunas de Neila, que sentenciará la clasificación general. En la Volta, la tercera etapa trae alta montaña con un final que roza los 2000 metros de altitud con la subida al Alto da Torre. Y, en Noruega, la Arctic Race supera el ecuador con la etapa más larga, por encima de los 184 kilómetros, que también termina hacia arriba con el puerto de primera categoría de Målselv Fjellandsby.