Orts comenta su estrategia para hacerse con la victoria: “Tenía previsto salir sin cebarme porque el circuito estaba muy complicado. Había llovido mucho y era un ‘sálvese quien pueda’. He salido a mi ritmo, pero han arrancado cuatro o cinco más rápido que yo e iban atacándose entre ellos y gastando muchísimo. He guardado fuerzas y a partir de media carrera he cogido el grupo de cabeza. Con tan sólo poner mi ritmo he abierto un hueco de diez, quince segundos, que he podido aguantar hasta el final. El objetivo aquí era ganar, lo hemos conseguido en una carrera complicada con rivales de bastante nivel como Thijs Aerts (Baloise Trek Lions) y Lander Loockx (Deschacht Hens Maes), a los que les favorecía el circuito más que a mí. Me he encontrado muy bien y una victoria fuera de España siempre es complicado y muy importante”, asegura.
Mañana la actividad continúa y el nivel de dificultad se incrementa. Felipe Orts afrontará su segunda cita del año en la Copa del Mundo en Overijse, Bélgica. La competición afamada como ‘La madre de todos los crosses’ presenta un recorrido con sus características subidas adoquinadas y con tramos muy técnicos donde es difícil tomar ritmo.