Mientras tanto, Felipe Orts vuelve a Centroeuropa para disputar dos pruebas y recuperar las buenas sensaciones después de los sinsabores del fin de semana pasado. El sábado afrontará en Hamme (Bélgica) el Flandriencross, sexta prueba del X20 Trofee, donde Orts fue noveno el anterior invierno. El circuito discurre en torno a dos charcas de la localidad belga sobre un terreno muy embarrado que en ocasiones se combina con zonas más cómodas de senderos. El perfil es plano con pequeñas subidas que pueden obligar a poner pie a tierra y se completa con una sección de escaleras y barreras artificiales.

Un día después, el domingo, la Copa del Mundo llega a su fin con la prueba de Hoogerheide (Países Bajos). El recorrido cuenta con varias modificaciones, pero mantiene la esencia de encadenados de giros a los que se suman un paso elevado nada más comenzar y escaleras en el último tramo. La pista del circuito es ancha y junto a la previsión meteorológica favorable permitirán una carrera rápida y reactiva.

El alicantino valora estas carreras como "la previa del Mundial. Hemos trabajado bien, también en la concentración del equipo de Almuñécar la semana pasada. Espero recuperar las sensaciones de navidades y en el Campeonato de España. Hoogerheide es un circuito que conozco bien y eso siempre es un plus. En Hamme el año pasado lo hice muy bien, incluso con la gran participación que había. Por lo tanto, soy optimista de cara a intentar repetir. Conseguir un buen resultado es importante para llegar con la moral alta al Mundial de Estados Unidos", concluye.