Sin suerte en el arranque de la Vuelta Madrid
El Burgos BH peleó por estar en la fuga de la jornada y por disputar el sprint final, sin conseguir sus objetivos pero anunciando batalla para las jornadas restantes. La Vuelta a Madrid no sonrió en su primera etapa al equipo, con una escapada que copó el protagonismo y un último puerto puntuable que se le atragantó al sprinter Matt Gibson, sin opciones en la meta de Aranjuez. El recorrido por la zona sureste de la región estuvo acompañado siempre de un constante viento, pero que nunca alcanzó suficiente intensidad como para amenazar con romper el pelotón principal.
Ante esta situación, el Burgos BH apostó por guardar al máximo sus fuerzas y pensar en las dos jornadas restantes, la 'etapa reina' de mañana y el tradicional circuito final del Paso de la Castellana el domingo. Ambas serán oportunidades para brillar, y el conjunto morado las afrontará con decisión y confianza.
José Cabedo "Ha sido una etapa relativamente fácil hasta el puerto final. Durante toda la jornada, ha soplado el aire pero no lo suficiente como para que se cortara el pelotón. Nuestra baza desde la línea de salida era Matt Gibson, y aunque lo ha pasado un poco mal en Chinchón, ha entrado a falta de 20 kilómetros de nuevo. Ha lanzado el sprint demasiado pronto y unido a la fatiga, no ha conseguido un buen resultado. Hemos desaprovechado una oportunidad, pero mañana es un día duro y tenemos corredores muy en forma que lo van a seguir intentando".
En efecto, este sábado se disputa la segunda etapa de la carrera, que tiene 164'5 kilómetros de recorrido con salida y llegada en San Martín de Valdeiglesias. Las subidas puntuables, un total de seis, se encuentran lejos de la línea de meta y es posible que la carrera llegue agrupada.